Donar sangre por primera vez
María Maya tenía ganas de donar sangre cuando cumpliese 18 años (en mayo) y lo ha hecho una vez terminados los exámenes de selectividad.
"Ha sido una experiencia buena y me siento muy bien", nos comenta.
Joven y muy bien informada
María ha decidido donar sangre de forma voluntaria y altruista y sobretodo de fomar decidida y conciencida. María sabía, antes de donar sangre, que con su donación se salvarán 3 vidas. Además de preguntar en su entorno, se ha informado a través de esta página web de todo lo relacionado con la ayuda que ha prestado hoy donando 450cc. de su sangre y su tiempo.
Y tiene toda la razón. Y es que, una vez donada la sangre, se analiza y se separa en tres componentes sanguíneos (plasma, plaquetas y plasma) para distribuirlos a los hospitales dónde están listos para trasfundir según la necesidad de cada paciente.
Su padre, su mejor ejemplo
El padre de María hace años que dona sangre. Sin duda, ha sido muy buen ejemplo para ella. Maria nos comenta que él está muy orgulloso de que hoy ella haya venido a donar sangre con tanta decisión.
Ayudar es una manera de vivir que han sabido trasmitirle y a la que se quiere dedicar María en el futuro y que pesa en la hora de elegir una carrera universitaria.
"Alguna vez lo podemos necesitar nosotros"
María es consciente de la necesidad de que la población done sangre y le gustaría trasmitir a los demás que el pinchazo ha sido como el de una analítica y que todos deberíamos probarlo. "No sabemos si alguna vez lo podemos necesitar".
Sin duda, muchos de los pacientes que han recibido alguna vez una transfusión le darían la gracias por tan bonito gesto que ya está pensando en repetir.